- Se Comprometieron en Trabajar en Pro de Una Buena Cultura del Agua, En sus Casas.
URUAPAN, MICHOACÁN; 26 DE NOVIEMBRE DE 2005.- Empleados de la Comisión de Agua Potable Alcantarillado y Saneamiento de Uruapan (CAPASU), realizaron un recorrido por los manantiales que abastecen de líquido vital a toda la población, ello con la finalidad de que conozcan todo el proceso de que se lleva a cabo antes de que el agua llegue a cada casa y la importancia del trabajo que se realiza en este organismo.
Mónica Arévalo Equihua, jefe de recursos humanos del Organismo Operador, informó que se trata de actividades que se realizan periódicamente y en especial con los trabajadores de más reciente ingreso, que en esta ocasión fueron dieciséis, pero no están exentos quienes ya tienen mas tiempo laborando.
Bajo la coordinación de recursos humanos y con la guía del biólogo Ernesto Cevallos Uzeta, se visitó el manantial Gandarillas 2, posteriormente el del Pescadito, la Hierbabuena y se finalizó el recorrido con el manantial Revelero. Durante todo el trayecto, Ernesto Cevallos dio una breve explicación sobre la función que realiza cada uno de los nacimientos de agua, la zona de la ciudad que abastece cada uno y las consecuencias de que disminuya del nivel del agua que éstos producen.
Comentó, que casi todos los trabajadores de las diferentes áreas de la CAPASU, dejaron ver su interés por conocer más de lo que cotidianamente hace la gente que labora en esos lugares, y manifestaron su preocupación por los malos hábitos que se tienen que propician la escasez de agua.
Los empleados que en su mayoría se desempeñan en las oficinas, se comprometieron por hacer siempre mejor su trabajo, ya que es una forma de evitar se escaseé el agua, ya que desde fuera, desde el punto de vista del resto de la población, es difícil percibir todo lo que se tiene que pasar para que cuando se abra una llave en Uruapan salga agua.
El recorrido que duró casi tres horas, finalizó con una pequeña charla con los trabajadores, quienes coincidieron en la importancia de estas actividades, por que solo de esa manera se puede dar el valorar en su real dimensión el agua. Además todos ellos se comprometieron en fomentar en sus propios hogares y con sus vecinos, una adecuada cultura del agua y de ser informantes de quienes les rodean, sobre la forma en que se puede evitar la contaminación.
Mónica Arévalo Equihua, jefe de recursos humanos del Organismo Operador, informó que se trata de actividades que se realizan periódicamente y en especial con los trabajadores de más reciente ingreso, que en esta ocasión fueron dieciséis, pero no están exentos quienes ya tienen mas tiempo laborando.
Bajo la coordinación de recursos humanos y con la guía del biólogo Ernesto Cevallos Uzeta, se visitó el manantial Gandarillas 2, posteriormente el del Pescadito, la Hierbabuena y se finalizó el recorrido con el manantial Revelero. Durante todo el trayecto, Ernesto Cevallos dio una breve explicación sobre la función que realiza cada uno de los nacimientos de agua, la zona de la ciudad que abastece cada uno y las consecuencias de que disminuya del nivel del agua que éstos producen.
Comentó, que casi todos los trabajadores de las diferentes áreas de la CAPASU, dejaron ver su interés por conocer más de lo que cotidianamente hace la gente que labora en esos lugares, y manifestaron su preocupación por los malos hábitos que se tienen que propician la escasez de agua.
Los empleados que en su mayoría se desempeñan en las oficinas, se comprometieron por hacer siempre mejor su trabajo, ya que es una forma de evitar se escaseé el agua, ya que desde fuera, desde el punto de vista del resto de la población, es difícil percibir todo lo que se tiene que pasar para que cuando se abra una llave en Uruapan salga agua.
El recorrido que duró casi tres horas, finalizó con una pequeña charla con los trabajadores, quienes coincidieron en la importancia de estas actividades, por que solo de esa manera se puede dar el valorar en su real dimensión el agua. Además todos ellos se comprometieron en fomentar en sus propios hogares y con sus vecinos, una adecuada cultura del agua y de ser informantes de quienes les rodean, sobre la forma en que se puede evitar la contaminación.
